En ellas podemos encontrar todo tipo de productos sexuales, desde los más comunes como los dildos o vibradores hasta lo último en tecnología y más sofisticados, como son los succionadores de clítoris y todas sus variantes. La revolución de éstas máquinas expendedoras sexuales se halla en la discreción que ofrecen a la hora de realizar una compra. Únicamente debes introducir el dinero, seleccionar el producto y listo, ya lo tendrás sin que nadie se entere de que lo has comprado.
También cabe destacar, que el precio de los productos sexuales que podemos encontrar en estas maquinas es (casi siempre) más reducido que el precio que podemos encontrar en cualquier sex-shop o tienda erótica.